TITULO: RÚBRICA
COMO INSTRUMENTO DE EVALUACIÓN EN EDUCACIÓN SUPERIOR
RESUMEN
Cuando
se habla de evaluación del aprendizaje, generalmente se hace referencia a
herramientas de corte cuantitativo como las pruebas objetivas, o de corte
cualitativo como los portafolios de evidencia, los ensayos o los informes, es
común encontrar razones a favor y en contra de estos dos modelos de evaluación,
tal vez porque en el ámbito educativo los expertos suelen tomar posiciones un
tanto polarizadas que generalmente los llevan a defender una y atacar la otra. El
propósito de este artículo no es hacer un abordaje sobre el debate entre estos
dos modelos o paradigmas evaluativos sino más bien presentar, de manera
teórica, un modelo de evaluación denominado rúbricas o matrices de evaluación
que permiten una integración de dichos modelos y a su vez proporcionar
indicaciones claras y precisas a los docentes en educación superior para su correcto
uso y para la correcta replica dirigida a los estudiantes.
La rúbrica es un
instrumento de evaluación auténtica del desempeño de los estudiantes, es un conjunto
de criterios que se utilizan para determinar el nivel de ejecución al que llega
un estudiante durante la realización de una actividad de aprendizaje. Se
diseñan en forma de una matriz de evaluación que por un lado tiene los criterios
a evaluarse y por otro, generalmente en la parte superior, los rangos que servirán
para evaluar el dominio de cada criterio.
PALABRAS CLAVE: Rúbrica,
evaluación, educación superior
INTRODUCCIÓN
Aunque
las rúbricas son una herramienta aplicable a diferentes campos de los procesos
educativos, en este artículo se hace una presentación de la misma aplicable
única y exclusivamente al proceso de enseñanza aprendizaje en educación superior.
Antes
de ahondar en el tema de las rúbricas conviene referenciar el termino
evaluación, que en términos educativos se define como “la acción permanente por
medio de la cual se busca apreciar, estimar y emitir juicios sobre procesos de
desarrollo del estudiante, así como sobre sus resultados con el fin de elevar y
mantener la calidad de los mismos”.
En
el contexto educativo, una rúbrica es un conjunto de criterios o de parámetros
desde los cuales se juzga, valora, califica y conceptúa sobre un determinado
aspecto del proceso educativo por lo que “las rúbricas también pueden ser
entendidas como pautas que permiten aunar criterios, niveles de logro y descriptores
cuando de juzgar o evaluar un aspecto del proceso educativo se trata”
En
este sentido, se puede afirmar que una rúbrica “es una descripción de los
criterios empleados para valorar o emitir un juicio sobre la ejecutoria de un
estudiante en algún trabajo o proyecto”, dicho de otra manera, una rúbrica es
una matriz que puede explicarse como un listado del conjunto de criterios
específicos y fundamentales que permiten valorar el aprendizaje, los conocimientos
o las competencias logrados por el estudiante en un trabajo o materia
particular.
DESARROLLO
La evaluación es una de las
acciones más importantes del proceso de enseñanza-aprendizaje porque se
convierte en el motor principal del cambio de paradigma educativo. La
evaluación debería ser un proceso continuo de reflexión tanto de quien aprende
como de quien enseña. Es injusto pedir al alumnado que participe de una amplia
gama de experiencias con el conjunto de competencias y después exigirle que
demuestre todo lo que ha aprendido mediante unas pruebas estándar que se
limitan a unas pocas destrezas o al recuerdo de información.
El
docente ha de considerarse corresponsable de los resultados que obtengan sus
estudiantes: no puede situarse frente a ellos como juez, sino con ellos como
miembro de un mismo colectivo; su pregunta no ha de ser “quién merece una
valoración positiva y quién no” sino “qué ayudas precisa cada cual para seguir
avanzando y alcanzar las competencias deseadas”, lo que exige un seguimiento
atento y una retroalimentación constante que reoriente e impulse la tarea. Esto
es lo que tiene sentido en una situación de aprendizaje creativo, orientando la
construcción de competencias.
Habrá que encontrar, pues, un
equilibrio entre la necesidad de una evaluación continua y la disponibilidad
real de tiempo para llevarla a cabo, lógicamente no es posible evaluar si se ha
logrado cierta competencia si no se pueden observar conductas o productos
relacionados con la misma. Es por ello que se necesitan elaborar instrumentos
que den cierta garantía de estabilidad en las observaciones y que permitan
hacer comparaciones entre estudiantes. Una
de las formas más interesantes de especificar los criterios de calidad en la
evaluación de competencias es mediante la utilización de las rúbricas o matrices
de valoración que facilitan la calificación del trabajo del estudiante
especialmente cuando se trata de tareas complejas, imprecisas y subjetivas. La
rúbrica puede definirse como un conjunto de criterios específicos que permiten
valorar los aprendizajes, los conocimientos y las competencias, logradas por el
estudiante en un trabajo o asignaturas. La matriz o rúbrica de valoración sirve
para averiguar cómo está aprendiendo el estudiante, pudiendo considerarse como
una herramienta de evaluación formativa (Andrade y Du 2005).
DEFINICION
Como señalan Torres y Perera (2010, 142) la rúbrica es un instrumento de evaluación
basado en una escala cuantitativa y/o cualitativa asociada a unos criterios
preestablecidos que miden las acciones del alumnado sobre los aspectos de la
tarea o actividad que serán evaluados. Básicamente, existen dos grupos: las
holísticas, que tratan de evaluar el aprendizaje o competencia desde una
visión más global, y las analíticas, que se centran en algún área concreta de
aprendizaje. Además, nos permite diseñarla para tareas amplias o específicas.
Las rúbricas son
guías precisas que valoran los aprendizajes y productos realizados. Son tablas
que desglosan los niveles de desempeño de los estudiantes en un aspecto determinado,
con criterios específicos sobre rendimiento.
Indican el logro
de los objetivos curriculares y las expectativas de los docentes. Permiten que
los estudiantes identifiquen con claridad la relevancia de los contenidos y los
objetivos de los trabajos académicos establecidos.
En el nuevo
paradigma de la educación, las rúbricas o matrices de valoración brindan otro
horizonte con relación a las calificaciones tradicionales que valoran el grado
de aprendizaje del estudiante, expresadas en números o letras.
Cualquier
rúbrica debe considerar las siguientes premisas: ser coherente con los
objetivos educativos que se persiguen, apropiada ante el nivel de desarrollo de
los estudiantes, y establecer niveles con términos claros.
Como
instrumentos de evaluación formativa facilitan la valoración en áreas
consideradas subjetivas, complejas o imprecisas mediante criterios que
cualifican progresivamente el logro de aprendizajes, conocimientos y/o competencias
valoradas desde un nivel incipiente hasta experto.
TIPOS DE RÚBRICA
La rúbrica
global, comprehensiva u holística hace una valoración integrada del
desempeño del estudiante, sin determinar los componentes del proceso o tema
evaluado.
Se trata de una
valoración general con descriptores correspondientes a niveles de logro sobre
calidad, comprensión o dominio globales (Tabla 1). Cada nivel se define claramente
para que los estudiantes identifiquen lo que significa. La rúbrica holística
demanda menor tiempo para calificar, pero la retroalimentación es limitada. Es recomendable
utilizar esta rúbrica cuando se desea un panorama general de los logros, y una
sola dimensión es suficiente para definir la calidad del producto.
La rúbrica
analítica se
utiliza para evaluar las partes del desempeño del estudiante, desglosando sus
componentes para obtener una calificación total. Puede utilizarse para
determinar el estado del desempeño, identificar fortalezas, debilidades, y para
permitir que los estudiantes conozcan lo que requieren para mejorar. Estas
matrices definen con detalle los criterios para evaluar la calidad de los
desempeños, y permiten retroalimentar en forma detallada a los estudiantes.
Además, cada
criterio puede subdividirse de acuerdo a la profundidad requerida.
Se recomienda
utilizar la rúbrica analítica cuando hay que identificar los puntos fuertes y
débiles, tener información detallada, valorar habilidades complejas y promover que
los estudiantes autoevalúen su desempeño.
La rúbrica
presenta tres características clave:
• Criterios de evaluación. Son los
factores que determinarán la calidad del trabajo de un estudiante. También son
conocidos como indicadores o guías. Reflejan los procesos y contenidos que se juzgan
de importancia.
• Definiciones de calidad. Proveen una
explicación detallada de lo que el estudiante debe realizar para demostrar sus
niveles de eficiencia, para alcanzar un nivel determinado de los objetivos. Estas
definiciones deben proporcionar retroalimentación a los estudiantes.
• Estrategias de puntuación. Se
consideran cuatro niveles: desempeño ejemplar; desempeño maduro; desempeño en
desarrollo y desempeño incipiente.
¿CÓMO SE ELABORA
LA RÚBRICA?
1. El primer
paso es determinar objetivos del aprendizaje.
2. Identificar
los elementos o aspectos a valorar.
3. Definir
descriptores, escalas de calificación y criterios
4. Determinar el
peso de cada criterio.
5. Revisar la
rúbrica diseñada y reflexionar sobre su impacto educativo.
Ventajas
• Se identifican
claramente objetivos docentes, metas y pasos a seguir.
• Señala los
criterios a medir para documentar el desempeño del estudiante.
• Cuantifica los
niveles de logro a alcanzar.
• Se brinda
retroalimentación luego de identificar áreas de oportunidad y fortalezas.
• Disminuyen la
subjetividad de la evaluación.
• Permite
autoevaluación y co-evaluación.
Desventajas
•
Requieren mucho tiempo para su elaboración.
• Es necesaria
la capacitación docente para su diseño y uso.
Tabla
1. Ventajas del uso de las rubricas en
el proceso educativo
|
1. Son
una poderosa herramienta para el docente que le permite evaluar de una manera
más objetiva, pues los criterios de la medición están explícitos y son
conocidos de antemano por todos, no se los puede cambiar arbitrariamente y
con ellos se hace la medición a todos los casos sobre los cuales se ofrezca
emitir juicios.
|
2. Promueven
expectativas sanas de aprendizaje en los estudiantes pues clarifican cuáles
son los objetivos del docente respecto de un determinado tema o aspecto y de
qué manera pueden alcanzarlos los estudiantes.
|
3. Permiten
al maestro describir cualitativamente los distintos niveles de logro que el
estudiante debe alcanzar.
|
4. Permiten
que el estudiante evalúe y haga una revisión final a sus trabajos, antes de
entregarlos al docente.
|
5. Indican
con claridad al estudiante las áreas en las que tiene falencias o
deficiencias y con esta información, planear con el docente las correcciones
a aplicar.
|
6. Proveen
al maestro información de retorno sobre la efectividad del proceso de
enseñanza que está utilizando.
|
7. Proporcionan
a los estudiantes retroalimentación sobre sus fortalezas y debilidades en las
áreas que deben mejorar.
|
8. Reducen al mínimo la subjetividad en la
evaluación.
|
9. Promueven
la responsabilidad.
|
10. Proporcionan
criterios específicos para medir y documentar el progreso del estudiante.
|
11.
Son fáciles de utilizar y de
explicar.
|
Adaptado
de Mertler, Craig A. (2001). Designing
scoring rubrics for your classroom. Practical Assessment, Research &
Evaluation, 7(25). Recuperado del sitio http://pareonline.net/getvn.asp?v=7&n=25
|
E-RÚBRICAS,
HERRAMIENTAS WEB PARA ELABORARLAS
Es común
consultar rúbricas impresas o ejemplos digitalizados y disponibles en Internet.
Cuando las rúbricas se elaboran con herramientas digitales para utilizarse en
entornos virtuales o en línea, se denominan e-rúbricas. Éstas son interactivas,
se evalúan rápido, sin esfuerzo, brindan inmediatez en la retroalimentación, y
el docente identifica las áreas a fortalecer oportunamente a diferencia de las
rúbricas impresas, que requieren mayor tiempo para procesar los resultados. Existen
diversos programas y herramientas digitales para realizar rúbricas de forma
sencilla, rápida y eficiente. La mayoría son gratuitas o la licencia de uso es
de bajo costo. Destacan las siguientes herramientas por su popularidad, facilidad
de uso y calidad en los productos creados.
La rúbrica al
hacer una descripción detallada del tipo de desempeño esperado, permite una
retroalimentación precisa, la cual favorece en los estudiantes una
autoevaluación y el monitoreo de sus avances y obstáculos, en el proceso de
aprender. Además, las herramientas Web para el diseño de rúbricas empoderan al
docente, el estudiante y a la institución, y promueven la cultura de la
evaluación auténtica en la educación superior.
CONCLUSIONES
Para que la evaluación pueda jugar
un papel positivo en el proceso enseñanza aprendizaje de competencias en
educación superior debe reunir algunas características básicas entre las que
destacaremos:
·
Ha de ser percibida como verdadera ayuda,
generadora de expectativas positivas, y no como enjuiciamiento externo.
·
Ha de ir más allá de lo que supone la actividad
individual de los estudiantes. La aceptación de la evaluación como algo
necesario para alcanzar las competencias se ve favorecida si se comienza evaluando
aspectos distintos de la actividad individual (interés de las actividades
propuestas, intervenciones del docente…).
·
Ha de extenderse a todas las dimensiones que
conforman las competencias -aspectos conceptuales, procedimentales,
actitudinales, afectivos- rompiendo con el reduccionismo habitual de centrarse
en lo más fácil de medir.
Por ello, ha de utilizarse un
conjunto de técnicas e instrumentos de evaluación que vayan más allá del
tradicional examen y que permitan recoger información sobre el proceso de
adquisición de competencias, dado el carácter multidimensional de las
mismas. Dentro de este conjunto de
técnicas evaluativas, una rúbrica constituye un instrumento útil para favorecer
el aprendizaje de competencias en cuanto que permite:
·
Poner de relieve y reforzar las competencias que
ya se manejan.
·
Detectar dificultades de los estudiantes y
reorientar su trabajo.
·
Favorecer la autorregulación de los estudiantes.
·
Transmitir expectativas positivas sobre la
adquisición de conocimientos y su evaluación.
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